Si han visto alguna vez dicho programa, seguro que se ganaron con las tremendas broncas de Gordon con los dueños de los restaurantes. Gordon tiene claro el valor que tiene el comensal, sabe que no puede ofrecerle cualquier cosa, porque el cliente se merece respeto; sin embargo a los dueños les interesa una cosa: ganar dinero, lo demás no importa.
En la universidad nos suelen enseñar mucha teoría sobre esto, pero verlo en un programa es otra cosa. Se impregna en tu mente, llega a la conciencia.
¿Cuántas veces nos hemos topado con algún empresario que ha decidido mermar la calidad del producto, solo por ahorrarse en costos? Sinceramente, no entiendo por qué se aprovechan de las personas, eso va en contra de la ética profesional. Bueno, hay personas que creen que en los negocios todo se vale.
Yo veo a Gordon como un "paladín de la justicia", más que como "el salvador de los restaurantes". Tal vez el programa se diseñó con el objeto de mostrar las habilidades de Gordon para resurgir negocios; pero "de paso" puedes reforzar lo que aprendiste en la universidad (Administración, Recursos Humanos, Marketing, Ética de Negocios).
Gordon, por lo general, suele cambiar la carta (diseño de producto), establece políticas entre el equipo de trabajo (recursos humanos), determina los tiempos de cocción adecuados, explica cómo seleccionar los mejores ingredientes (logística-operaciones) y rediseña el establecimiento (visual merchandising).
¿Alguna vez lo viste así? Es una buena manera de aprender. No es necesario que tengas tu propio restaurante o trabajes en el rubro. Quién sabe, a lo mejor un día nos toca asesorar a alguien con este tipo de negocios y ya tenemos noción de los posibles problemas y las soluciones. Todo gracias a la óptica y experiencia del chef Gordon Ramsay.
Así que ya sabes, la próxima vez que mires televisión, cheka qué cosa puede servirte en tu día a día.
Ahora los dejo con un fragmento del programa Kitchen Nightmares.
Un abrazo mis estimados.
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